Toledo
Toledo es una ciudad mágica. Parte de la culpa es que en ella han convivido las tres culturas base de nuestra cultura occidental: árabes, judíos y cristianos. Dios sabe (o Alá, o Yahveh) la de historias que sucedieron en sus calles (amor, odio, amistad, misterio) que da esta mezcla tan heterogénea. Brevemente te contamos nuestra viaje, para que no te capture ningún fantasma malvado.
Lo primero que sorprende al llegar, si lo haces desde Madrid en coche, es la Puerta Bisagra, mandada construir por Carlos V para guardar (y también cobrar impuesto de entrada y salida, que ya entonces se sacaba la pasta de donde fuera) la capital del imperio que fue Toledo por aquel entonces. Si giras en esa rotonda a la izquierda puedes encontrar parking gratis. Y desde alli puedes subir y encontrarte con la Puerta del Sol, de estilo gótico-mudejar, y una de las más bellas de Toledo.
Toledo es una ciudad para perderse entre sus estrechas calles, ya que en cada rincón uno siempre descubre algun «tesoro» escondido. Por ejemplo, atravesando la citada puerta, nos encontramos con la Mezquita de la Luz, construida sobre una calzad a romana, que se puede ver. Es pequeña, y ahora está en restauración, pero cuando terminen merecerá mucho la pena visitarla por dentro.
Te recomiendo que vistes la catedral. La entrada son 7 euros e incluye la visita a la sacristía, que es donde el edificio guarda sus mejores tesoros. Puede que vayas prevenido de que vas a ver cuadros del Greco, que sí, que la sacristía está llena deellos, pero llama la atención que haya también cuadros de Rubens, Tiziano, Lucas Jordán, Velázquez, Van Dyck e incluso un Rafael! Impresionante.
No puedes irte de Toledo sin darte una vuelta por el barrio judio y vistar alguna de sus sinagogas. La más popular es la Sinagoga delTránsito, integrada en el Museo Sefardí (3 euros, estudiantes gratis). Alli puedes ver cómo era una sinagoga antigua, y el proceso de restuaración que ha sufrido, ya que tras la reconquista fue destinada como iglesia. Como la mayor parte de los monumentos que encontrarás en Toledo, muchas iglesias fueron antes sinagogas o mezquitas. La catedral sin ir más lejos está construida sobre los cimientos de una antigua mezquita. Si sigues caminando,según sales de la sinagoga a la izquierda y bajando, te encontrarás con la iglesia de San Juan de Dios, donde los reos capturados por los musulmanes en las guerras, tras ser liberados, colgaban sus antiguas cadenas de su fachada en señal de gratitud.
La ciudad de Toledo se halla casi rodeada por el Tajo. Puedes subir al Parador de Toledo, en el Cerro del Emperador para apreciarlo y contemplar unas vistas espectaculares de la ciudad. Nos quedan muchas cosas por ver (como por ejemplo el Alcazar) asi que… volveremos! Wambú !!