Kandinsky y la constante innovación

 

Alfonso Boza | @red_halcon | 19 enero 2016

 

La exposición Kandinsky. Una retrospectiva (en Centro Centro Cibeles hasta el 28 de febrero) se vertebra en el camino incansable de un artista hacia la innovación, en su búsqueda constante de romper las reglas siguiendo el criterio estético de la forma y el color. La entrada a la exposición incluye el audioguía, por lo que este recorrido se hace más interesante. Es la primera retrospectiva de uno de los grandes pintores del s. XX en España, además de estar formada por cuadros de gran valor, al tratarse de obras que nunca fueron vendidas, que el pintor conservaba en vida. El legado que su viuda Nina dejó al Centro Pompidou de Paris.

 

La exposición se organiza en las grandes etapas en la producción artística (y en la vida) del pintor ruso. Desde sus inicios, de influencia fuertemente ligada al impresionismo, Kandinsky trató de innovar, lo que le llevó a explorar múltiples temas y formatos mostrados en la exposición. Su fuerte crisis personal, al verse frustrado por no conseguir la originalidad buscada, le llevaron finalmente a su Improvisación IIIcuyos colores y líneas rupturistas encuentran significado en la exposición del artista ruso.

Wassily Kandinsky - Improvisación III (1909)  © Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.
Wassily Kandinsky – Improvisación III (1909)
© Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.

El Kandinsky. Una retrospectiva también se muestra su evolución hacia la abstracción, que lleva a Kandinsky a convertirse en uno de los grandes teóricos de la pintura a través de sus estudios sobre el color y la forma, donde fue profesor y pilar fundamental de la escuela Bauhaus. Se descubre la influencia del constructivismo alemán en obras como En Blanco II, donde retoma el tema del jinete visto en Improvisación III, e introduce algunos de los que serán sus iconos en el resto de su producción, tan bien explicados durante la exposición.

 

Wassily Kandinsky - Sobre Blanco II (1923)  © Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.
Wassily Kandinsky – Sobre Blanco II (1923)
© Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.

 

Kandinsky, tras un largo periplo por Europa, acaba en París con su esposa Nina. El final de la Segunda Guerra Mundial, que no llegaría a ver, le hace evadirse en el mundo onírico del surrealismo que conforma la última sala de la exposición. Su amistad (más que evidente) con los surrealistas Jean Arp y Joan Miró, hace que se fije en formas biomórficas, y le lleve a la conclusión de que la creación surge del inconsciente y el sueño, no de la razón.

Wassily Kandinsky - Cielo Azul (1940)  © Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.
Wassily Kandinsky – Cielo Azul (1940)
© Wassily Kandinsky, VEGAP. Madrid, 2015.

Kandinsky. Una retrospectiva muestra, en definitiva, el viaje vital del pintor ruso, y cómo su búsqueda constante por la innovación le ha convertido en uno de los grandes pintores del siglo XX. Hasta el 28 de febrero en Centro Centro Cibeles. Y OJO! Recomendamos sacar las entradas por anticipado en ticketea ya que se suelen agotar en poco tiempo para los pases.